La escuela ha vuelto a ser lo que antes. Una clase tras otra, pocas horas libres, llegar cansado a estudiar y eso que todavía no empiezo a operar perros, eso sí que me va a quitar un resto de tiempo. Todos los días es ir corriendo semidormido para poder alcanzar la clase de las 7.00, escuchar un poco de sarcasmo celular, luego pasar a farma con un maestro que se me afigura locutor de radio de antes, que habla de como actúan las medicinas. Saliendo entro a diagnóstico con una doctora que habla, habla, habla, todo es importante, todo sirve, no toma aire, sigue hablando, no toma agua, sigue hablando así que tienes que estar poniendo atención. Receso pequeño, unas papas, un frutsi, un cigarrito (ahorita no porque ando enfermón) , ahora a Respi a divagar, pensar en nada, en por que diablos tengo tantos mocos en la nariz, por que no me quedé afuera, estoy tan aburrido, falta media hora, faltan venticinco minutos, divago, hasta que llega el momento de decir "doctor tenemos clase" y asi acaba ese pequeño martirio del día. Todos al carro, fuga al hospital militar a clase de gastro con un dr. militar al que se le va la onda de repente, gracioson y estricto a su estilo, ¿ sabias que no se dice "hacer", se dice "evacuar"? hasta por eso lo regañan a uno.
Por fin pude ir al hospital a hacerme pasar por médico. "Buenos días soy el Dr. Ardilla y le vengo a hacer unas preguntas" yeah!. Urgencias en el central es un área pequeña, sin mucha privacidad, es raro como el paciente no es el centro de atención a menos que algo importante le este pasando, al menos asi sentí yo que era. Una señora desnutrida, un esguince, una fractura de tobillo, una chica inconsciente por tomarse un frasco de pastillas, y asi fueron llegando varios pacientes, mis primeros pacientes.

Sugiero: "amor suicida" -dos minutos-