De cuando fui misionero

sábado, abril 2 by Cacahuate
A continuación se podra leer todo lo vivido en la semana santa, mientras andaba de misiones con el Grupo Santo Domingo.

Domingo 20 de Marzo


De nuevo en Papajichi. Un día en donde todo conspiró para que llegáramos tarde.
El camión salió a tiempo, rezamos el rosario y lo primero que nos hizo detenernos fue que el Emerick había olvidado sus pilas para los oídos. Ya cuando llevábamos como 2 horas empezó a salir un resto de humo del camión y nos tuvimos que detener por que se había jodido el turbo, o un pistón o no se que madres. Así que mientras esperábamos tuvimos que hacer deporte (parecía una clase de educación física) jugaron fut, yo jugué frisbi y un poco de voley.
Nos trajeron otro camión y tuvimos que volver a pasar todo. Había una bolsa negra de esas grandes de la basura, con un chingo de donas que ya mas bien parecían una gran masa glaseada y para colmo se le hizo un hoyo y terminamos todos llenos de chocolate por andar limpiando.
El camino como siempre, platicar y tratar de dormir aunque estaban aviente y aviente pelotas de las que nos regalaron no te dejaban descansar. Esta vez casi nadie cantó y no pudimos instaurar himno de este año. Yo estoy intentando que se quede la de Reik pero pues nadie se la sabe.
Vinimos llegando a la mesa bien tarde ya estaba oscuro y la bajada a Papajichi fue mas lenta por que no se veía nada, aparte como que ha llovido mucho y había un arroyito traicionero que te hacia resbalar si te descuidabas.
Llegamos y a descargar el camión chiquito para que pudieran ir por los demás. Me altere un poco por que no había orden y numas estábamos aventando los pesadísimos costales de frijoles (60 kg) donde cayeran. Así que después de limpiar los tuvimos que volver a mover todos (a ver si no nos sale una hernia). Luego descargar todas las maletas y escoger cama. No tiene caso escoger una chida por que no voy a durar mucho aquí, luego luego nos toca irnos a Tatahuichi.
Lo bueno es que hay mucho que hacer y nos vamos a quedar todavía el lunes trabajando aquí. Lo malo es que se me olvidó el cepillo de dientes (otra vez) y este años no nos donaron, el Chuma me prestó uno usado pero pues ni pedo prefiero eso a no lavarme la boca.
Tenia muchísimas ganas de venir, cuando me dijeron que iba a Tatahuichi se me quitaron completamente, ahora vengo a cumplir y a tratar de disfrutar todo, espero y me lleve una gran sorpresa con el lugar aunque realmente lo dudo.
Vinimos 27 gentes.

-- Papajichi : Kako, Chuy, Oc, Paco, Jorge, Adriana, Melissa, Pico, Lety, Marce, Martha, Laura, Tania, Ricardo (general), Emeric y la Doctora.

-- Tatahuichi : Vero, Monica, Gaby, Rosy, Erika, Pepe, Chuma, Miguel, Omar, el Doc y Yo.

A ver como nos va espero y las siguientes paginas se tornen mas positivas y se vaya desapareciendo ese sentimiento de inconformidad que no me he logrado quitar.
Alguien esta roncando bien feo enseguida de mi, así que ya creo que es hora de apagar la linterna y dejar de escribir.

Lunes 21 de Marzo


Cuando te toca hacer desayuno tienes que estar despierto desde temprano así que a las 8.00 ya estaba yo con sartén en mano haciendo huevos con salchicha y sirviendo café.
Se suponía que había mucho que hacer, que teníamos que estar trabaje y trabaje pero cuando fuimos a lavarnos los dientes nos desviamos un poco y terminamos adentro del río. El agua estaba congelada de esas veces que metes los pies y hasta te duelen . Llegamos a un lugar donde te llegaba hasta las axilas y me puse a nadar un rato, antes me quite la camisa pero no me quite los lentes y ya de regreso que me voy dando cuenta de que no los traía, me tuve que devolver y volver a meter. Ya me había resignado a pasar un semana con dolor de cabeza y dificultades para ver pero mis pies los encontraron enterrados en el lodo bajo el agua.
De vuelta en la casa a descargar y cargar el camión, separar medicinas, cargar mangueras, hacer incendios de basura y esperar la hora de comer.
Durante la tarde fue volver a separar medicinas hasta que llegaron los niños del catecismo, nos pusimos a pintar y a cantar el “onoruame”.


Llegó Martín (un amigo rarámuri) y nos dice que el nos lleva por leña, así que, armados con una linterna nos fuimos al bosque a tratar de recolectar para la fogata. Es impresionante la fuerza del rarámuri primero nos jugaron una carrera a la cima y por supuesto que ganaron y por mucho. Después nosotros cayéndonos y aquellos parecía que podían esquiar entre la hojarasca. Ni se diga da la hora de cargar yo venia con un tronco como de 70 cm y unas cuantas ramitas y ya venia exhausto; Martín con un tronco del doble o más de su tamaño, bien grueso y ni se quejaba.
Este año no hay buzón, se llama buzón del dr. Corazón y al que le toca se tiene que poner una bata de corazón y darle consejo a todo aquel que eche algún problema.
Por último fogata, rezamos un rosario y a cantar. Lo bueno es que Miguel esta aquí, el sí se sabe canciones de las buenas, cantamos “lucha de gigantes”, “ with arms wide open”, “cuando un verso de nombra” y nos libramos de aquellas apestosas canciones del año pasado como “árboles de la barranca” y “el africanito”.
Ya mañana nos vamos y eso apesta. Así que tendré que volver a doblar sleeping, hacer maleta, escribir mensajes de despedida, y dejar este pueblo que disfruto tanto.

Martes 22 de Marzo


Hasta ahorita no hay quejas, el pueblo esta bien chido, muy grande el área y al parecer va a venir mucho gente. Hace menos y frío. Ya construimos un baño, bueno nomás un cuartito de maderas clavadas medio mal.
En Papajichi poco les faltó para correr junto al camión cuando nos fuimos, abrazo a todos y pues la Melish hasta lloró un poquito.
Contrario a lo que esperaba los ánimos del equipo Tatahuichi andan bien arriba, mucha risa, mucha platica (aunque a veces se vuelve un monólogo de las aventuras de Chuma) y mucho trabajo.
El camino para llegar al pueblo esta bien culero, o mas bien era como veníamos acomodados entre maletas, despensa y bancas que solo disponíamos de un micro espacio para acomodarnos 12 gentes.
Llegamos, nos instalamos en un salón de una escuela que desde ahora será cuarto, cocina, comedor, dormitorio y hasta amenaza con ser consultorio.
Descargar todo de nuevo, es la vez que mas hemos subido y bajado cosas del camión. Los tarahumaras nos ayudaron y de nuevo los niños chiquitos con caja gigantes de ropa y nosotros batallando con las cajas de los jugos.
Mientras nosotros construíamos un cuarto de baño, las muchachas hicieron la comida y volvieron el cuarto mas hogareño, pusieron velas aromáticas y acomodaron la despensa. Descubrí que puedo serruchar y clavar y no soy tan mal (creo).
Acá tenemos un problema con la comida, traemos muchísimas latas de chile y un frasco de café para cada quien pero no traemos ni huevos, ni tomate, ni cebolla y creo que bien poquita carne. Viviremos de una mezcla de chile con galletas saladas y atún.
Trajimos cine al pueblo, entiendase por cine una tele pequeña donde pasan películas religiosas. Se suponía que teníamos que ver una que se llama “El Manto Sagrado” pero cuando me senté en el suelo del tempo con toda la intención de verla un señor me dijo “cuidado con las pulgas por que hay un chorro”. Así que mejor me salí a platicar con todos agarrados/abrazados para protegernos del frío. Por cierto, el Doc nos regaño por que no vimos la movie.
De vuelta a la casa, a hacer el tendido donde íbamos a dormir, hicimos un piso de trozos de Pancho (una tela gruesa bautizada así años atrás), pusimos los sleepings, cenamos café y galletas (recuerden no darle café a Gaby en la noche por que empieza de ruidosa), nos lavamos los dientes y acostarse en un sleeping mojado por que le acaban de echar agua sin querer.

Miercoles 23 de Marzo


Tunt, tunt, tuntunt. Tambores, se oyen muchos, al parecer se van a oír toda la noche y todo lo que nos queda de la semana. No se como no se cansan de bailar y tocar.
Hoy es el segundo día que estamos por acá, todo va bien. Después de un crujiente desayuno nos fuimos al templo a la bendición de las palmas, llegaron un chorro de tarahumaras ya con sus tambores y sus manchas blancas pintadas por todo el cuerpo. Haciendo su doble paso con sus vueltas y otros corriendo con unas matracas. Nos tomamos algunas fotos y luego nos metimos al almacén a hacer bolsas de harina y frijoles para poder entregar en las despensas. El sistema ya esta organizado uno hace bolsas, otro las llena y otro hace nudos. Lo malo fue que no nos fijamos que había unos costales de frijoles que no eran nuestros, así que también los hicimos y los entregamos, resultó que eran de la dueña de la casa que nos esta prestando un cuarto para usarlo de bodega y por un momento fuimos acosados de ladrones. Lo bueno fue que traíamos otros y alcanzamos a reponerlos antes de que nos pusieran en la cruz de los castigos.
Afuera del almacén se armó la fila enorme de rarámuris y empezó la producción de despensas. Mónica echaba un jugo, una lecha y una lata de carnation; Pepe maseca y mangos; Erika y el Doc cargaban los chimikis (jorongos) para aventar todo ahí; Omar apuntaba a quien se la íbamos a entregar; Yo echaba chachitos y galletas emperador. En 2 horas o menos nos aventamos 230 despensas. Los demás (Vero, Chuma y Rosy) se quedaron haciendo la comida y llegaron al último a ayudar un poco.
Comer, y de sobremesa platicar del violador de San Felipe, las muertas de Juárez y el sistema de justicia que no sirve para nada.
Salir a caminar un rato, yo iba con toda la intención de meterme al río pero se metió el sol y el agua estaba congelada así que no quedo otra que regresar seco a la casa a preparar la función de cine de hoy.
El templo se llenó. Pusimos la de “La Pasión”, los rarámuris estaban impresionados. Creo yo que es una película un poco fuerte para los niños pero tal vez si la ven nos sea mas fácil explicarles que es todo lo que se celebra durante esta semana.
De nuevo a la casa a cenar, pareciera que estamos ayudando por que con eso de que no hay comida ni tiempo cenamos un café y un pan. Nos leyeron unas cartas de las que mandaron los de Papajichi y yo aproveche para leer una que me mando la Roseta.
Cantaron unas cuantas alabanzas y luego hicimos una evaluación de cómo nos sentíamos hasta ahora. Yo estoy un poco enojado por que no ha habido nada de consulta y se supone que era una de las cosas por las cuales a mi me traían para acá, en fin, espero y mañana venga mas gente y se acerque a que la cure el Doc y me enseñe a curar. Me voy a poner mi playera que dice “Médico” a ver si así alguien pregunta.

Jueves Santo 24 de Marzo


Hoy pasaron muchas cosas, tratare de recordarlas bien.
Mi cuerpo ya necesitaba un baño, traía el pelo lleno de tierra y se quedaba tieso desde que me despertaba, aparte creo que otra capa de desodorante ya no iba a poder hacer el truco. Me apunte en la lista y me tocó agua caliente. Ya limpio a desayunar, luego consulte con el Doc (por fin ) tomé la presión y creo que es la primera vez que me sale bien, escuche unos pulmones, aprendí a decir “respire hondo” en rarámuri pero ya se me olvido.
En el templo había mucho movimiento y no sabíamos por que hasta que vimos que sacaron un ataúd. El hijo del siríame (gobernador) había fallecido en Chihuahua, anoche trajeron el cuerpo y ahora se disponían a enterrarlo.
Es un ritual un poco diferente, primero dan vueltas al templo bailando y le ponen palmas a la caja. En el cementerio esta cavada una fosa, bajan el ataúd, le acomodan las palmas, echan la maleta y las botas del difunto, después le rocían pinole y empiezan a echarle tierra con pico y pala. No había ninguna mujer mas que la mamá, todos los demás eran hombres. Una vez tapada la fosa cada quien agarra una piedra grande y las ponen a manera que se forme un perímetro alrededor de la tumba, le dejan un bote con agua y una bolsa de pinole enseguida de una cruz de madera donde viene su nombre y edad.
A continuación tienen un ritual de purificación en el cual le prenden fuego a hojarasca y la cubren con pino verde. Todo el humo que sale sirve para poder purificarse y así seguir con la fiesta. Cada raramuri que ayudó a cavar trata de impregnarse de humo lo mas posible, hacen lo mismo con la pala y el pico que sirvieron para cavar. Una vez terminado el proceso de purificación le dan varia vueltas bailando a la fogata de pino verde y tocan los tambores más rápido que lo normal.
Vinimos a la casa y llegó el gobernador, le dimos el pésame, le regalamos un crucifijo que traíamos (que no soltó en todo el día).
Mas tarde se llegó la hora de celebrar a su manera el jueves santo. Dimos unas cuantas vueltas alrededor del templo pasando por 7 arcos hechos de madera y hojas donde nos deteníamos a rezar un “Keti Ono” (Padre Nuestro). Terminando cada vuelta entrábamos al templo y nos percinabamos 3 veces dando un vuelta sobre tu propio eje cada vez que terminabas.
Oímos misa en rarámuri, se hizo el lavado de los pies a 12 niños y cantamos un par de canciones.
Hoy me tocaba hacer comida, así que me devolví a la casa a picar winnies y cebolla, hacer arroz y esperar un chorro a que se cocieran unas papas.
Comer y luego salir a caminar a un lugar bien fregón, medio lejos, donde había una lagunita flanqueada por unas piedras enormes. Ya estaba oscureciendo pero no me podía ir de aquí sin haberme metido al río. Me puse un short, fuera playera y sin pensarla mucho saltar al agua congelada. No sentía la piel, nomás me dolían los dedos de pies y manos, si metías la cabeza se sentía como cuando das un gran sorbo a un raspado frío.
Vero y Mónica también entraron pero no duraron mucho, creo que dure demasiado por que cuando salí tenía muchísimo frío, me costaba agarrar un ritmo de respiración, castañeaban mis dientes, lo único que quería era ponerme algo seco asó que termine encuerándome detrás de la primer piedra que vi sin fijarme si alguien me veía.
Tarde un rato en agarrar calor y luego de nuevo la caminada de regreso a casa platica y platica con la monica, bien chido por que como que traemos quejas parecidas y mas o menos las arreglamos, o al menos las sacamos.
Hoy es Jueves de velación, no se va a poder hacer en el templo por que van a estar bailando toda la noche. Asi que decidimos hacerla en el cuarto, rifamos los horarios, a mi me tocó a las 5.00 de la mañana. En este momento todo mundo esta dormido, Miguel esta haciendo su hora, esta cantando. Yo mejor me duermo por que hay que despertar temprano a velar.

Viernes Santo 25 de Marzo



5.00 am mi hora de velación. Nunca me había tocado velar solo, siempre era con mas gente, solo es diferente, se vuelve una oración mas personal. Así cumplí mis 2 horas. Luego dentro del sleeping de nuevo, trate de dormir un poco para no estar tan cansado pero me despertaron a desayunar pan y café por que ya teníamos que irnos a la celebración del víacrucis.
Vueltas al templo, tambores, baile, pasar por los arcos, en eso consiste su ritual. Nosotros agregamos una representación del vía crucis, leemos cada estación y explicamos las 7 palabras. Algo diferente aquí es que cargan a Onoruame (Dios) y van y lo dejan al cementerio. Después todos los que participaron te dan la mano, los que bailaron te dan la izquierda y los que no la derecha.
Terminando el ritual nos invitaron a comer pero resultó que ya no tenían comida, solo nos ofrecieron un medio coco lleno de tesguino que nos teníamos que acabar ente todos. Sabe bien raro y le flotan cosas.
A comer a la casa, el ayuno nos traía con hambre. Mucha sobremesa Chuma contándonos sus aventuras de cómo lo criaron en una escuela para machos. Terminando todos al monte, a ir al baño, por que aquí las letrinas se han vuelto un asco, la gente no las usa bien y han quedado inservibles por insalubres.
Llegando del monte a repartir ropa y chamarras. Mientras dábamos ropa llegó gente a consulta y los revise solo. Todo iba muy bien hasta que llegó una señora ya grande que no hablaba español y aparte yo ya había olvidado como decir “respira hondo”y “tienes diarrea?” así que me atore y le tuve que hablar al Doc para que él la checara.
Al templo a ver la Pasión de nuevo, no iba a poder aventármela otra vez, iba a caer dormido. Por eso, me vine con Mónica a prender una fogata a hablar, hablar, y hablar de todo. Bien chingón. Duramos mucho rato hasta que llegaron los que venían del templo y a cenar. Estando ahí en la fogata se acercaron unas niñas rarámuris y se pusieron a cantar y a platicar con las muchachas por que si yo les decía algo numas se reían y no contestaban.
Ultima noche aquí, todo bien, aunque faltan dinámicas.

Sabado de Gloria 26 de Marzo


Ultímo dia. Desayuno de nuevo, picar papas, freír chorizo, hacer avena y servir mientras iba avanzando la fila para entrar a la regadera. Fui de los últimos, como teníamos que vaciar el tinaco me dieron chanza de durar todo el tiempo que quisiera.
Luego recoger, volver a poner las bancas en su lugar, doblar sleepings, rehacer maleta, repartir todo los que nos quedó y empezar a cargar el camión.
Mis ánimos bien, la semana en Tatahuichi estuvo bien, poca consulta pero nuevas experiencias. Antes de irnos fuimos a la foto del templo, adiós a toda la gente y al pueblo. Correr al camión para ganar lugar cómodo, que resultó no ser tanto por que venia sobre unas tablas y no cabía. El regreso tranquilo, comiendo Totis y frituras con chile para no marearme.
La llegada a Papajichi estuvo bien , abrazo a todos, qe como nos fue, que como estuvo. Mis ánimos bien.
Descargar el camión de nuevo, irse a la foto ahora en el templo de Papajichi hacer una oración final y volver a casa.
Ir al río, solo, a pensar un rato. Llegó Kako y me hizo compañía, platicamos un rato de cómo estuvo la semana por acá y recordamos años pasados.
Me enteré de que acá consultaron como 200 gentes, que coraje, mis ánimos mal. Se supone que yo iba a aprender y no aprendí nada allá por que no hubo consulta. En una hora que entre al consultorio de aquí vi casi el mismo número de gente que en toda la semana de allá.
Cenar, la mesa llena, que chingón, eso se extraño bien cabrón. Me entregaron la carta que mandaron mis padres y cada quien leyó la suya. Se entregaron los Papajichi Awards, mis ánimos de la chingada, se siente bien feo cuando no te sientes parte de algo, estos con sus chistes y sus puntos de su semana y nosotros en la luna, completamente desentendidos de quien hizo que, como y cuando.
Recoger todo de nuevo, la cocina, el consultorio, luego una fogatilla. Por acá cuenta que la semana estuvo un poco desordenada, otros que bien fregón y otros que faltó algo.
¿Qué faltó? Falto que estuviéramos juntos, por que el hecho de estar separados hace que no se viva una unidad plena. Ni siquiera hubo dinámica de cierre, falto del abrazo de despedida y las palabras de aliento que se dicen todos. Que culero.

--------------------------------------------

Un año mas, un año diferente. Llegando sabremos que tanto sirvió, que tanto unió o que tanto separó. Para mi fue un buen año, siempre aprender algo. No fue el mejor. Creo que no volvería al lugar donde fuera la minoría, o mas bien no volvería al lugar donde no hubiera consulta. En estos momentos no quiero llegar a casa, volver a la rutina apesta, volver a la escuela también. Por mí me quedaría otra semana aquí...bueno fuera que se pudiera.

Posted in | 0 Comments »

0 Comentarios:

Anda Léelos